¿Gestionas un blog? Entonces sabrás lo importante que es aprender a retener al lector que llega a tu sitio. Una de las mejores formas es saber aprovechar las diferentes secciones de un blog. Por ello, aquí va un pequeño repaso a las 5 secciones que deberías tener sí o sí en tu blog.

1. Menú principal

El papel del menú principal es imprescindible. Con él podrás guiar a tus lectores para que vayan de un apartado a otro. Eso sí, tienes que tener cuidado y poner sólo lo imprescindible. No sobrecargues esta zona.

Lo ideal es que pusieras un apartado de contacto, un “sobre mí” y categorías principales de tu blog, que no son lo mismo que las etiquetas.

¿Sabes la diferencia? Por ejemplo, si tienes un blog de fotografía, tus categorías principales podrían ser “fotografía en blanco y negro”, “retratos”, “paisajes”… Mientras que las etiquetas podrían ser “Retratos comuniones”, “Paisajes de Madrid”, “Paisajes de Barcelona”, “Retratos de parejas”, etc.

Es decir, las categorías hacen referencia a un grupo grande de temas, y las etiquetas forman subgrupos de esas categorías. Lo ideal es que, si tienes un blog personal, utilices esas categorías para que tus lectores, de un vistazo, tengan una primera idea de los temas que se pueden encontrar en tu blog.

Si por ejemplo tienes un blog de empresa o donde promocionas tus servicios, lo ideal es que aproveches esas palabras para posicionarte como profesional y para que tus posibles clientes sepan cuáles son tus puntos fuertes.

2. Sobre mí

Este es uno de los apartados más importantes de tu blog. Da igual si tienes un blog personal o de empresa. La gente necesita conectar con la persona que le escribe o con el equipo que hay detrás de dicho blog.

La curiosidad es innata, y seguramente este apartado reciba una gran cantidad de visitas a lo largo de los meses así que tienes que cuidar mucho el copywriting de este apartado. Intenta que no sea muy denso, que sea directo y que no aburra. Cuenta lo imprescindible pero sin ser un robot. Intenta que quien lo lea se sienta identificado y que conecte contigo: más que centrarte en tus logros, utilízalo como “declaración de intenciones” (lo que pretendes conseguir con tu blog) y también como una pequeña biografía.

Además, para que la personalización sea aún más efectiva, puedes añadir una fotografía tuya: a la gente le gusta conocer qué cara tiene la persona que le escribe para hacerse una idea en su cabeza.

3. Contacto

La zona de contacto es otro de los imprescindibles de tu blog. Da igual el objetivo que tengas: si es un blog personal puede que te interese que puedan contactar contigo para colaboraciones, o si tienes un blog de empresa seguramente querrás que tus clientes se pongan en contacto contigo, ¿verdad?

Añade en el menú principal este apartado pero no te limites a poner un formulario de contacto sin más. Necesitas elaborar un pequeño texto resumen donde cuentes por qué la gente querría conectar contigo.

4. Sidebar

Es la columna (o columnas) que suele haber en los laterales del blog. Justo al lado del cuerpo de los artículos. Suele ser uno de las secciones que pasan más desapercibidas, pero no por ello dejan de ser importantes. Con esta sección también puedes ayudar a guiar a los lectores por los contenidos de tu blog mientras leen un artículo tuyo.

Puedes utilizar la sidebar para resaltar contenidos importantes de tu blog, animarlos a suscribirse a tu newsletter o seguirte en redes sociales, resaltar las categorías o etiquetas de tu blog, etc.

Un error muy frecuente en la configuración de la sidebar es sobrecargarla de contenidos: intenta que sea lo más limpia posible y que no ocupe más que la extensión de tus artículos.

5. Footer

El ‘Footer’ corresponde al pie de página de tu blog. Esta sección es lo último que verán tus lectores y pese a la importancia que tiene, os sorprendería descubrir la cantidad de webs y blogs que desperdician este espacio y que no aprovechan esta sección. Puedes utilizarla de varias maneras, hay algunas que son más minimalistas y otras que contienen más información.

Lo ideal es que resaltes lo más importante del blog. Algunos utilizan este apartado para añadir un mini “sobre mí” (información del autor o de la web), otros aprovechan para recordar que te puedes suscribir a su newsletter, mientras que otros recuerdan su blogroll (etiquetas y categorías que más utilizan), así como links a sus redes sociales y la política de privacidad y cookies.

En resumen: si tienes un blog, sea del tipo que sea, no desperdicies ninguna de las secciones. Cuida con mimo cada elemento porque con cada sección puedes convencer a un lector para que se quede, o, por el contrario, asustarlo e incluso aburrirlo.