Hoy, 8 de marzo, nos sumamos a la lucha del Día Internacional de la Mujer. Desde aquí, queremos poner fin a la desigualdad. Aunque todavía queda mucho por hacer en este largo recorrido hacia el feminismo, en Arnold tratamos de poner freno a esta lacra contando con un genial equipo de mujeres en todos los departamentos y niveles que, cada día, va creciendo más.

Lo cierto es que, como sociedad, ya hemos dado grandes pasos hacia la igualdad de derechos entre hombres y mujeres. Por ello, es justo ahora cuando debemos concienciarnos para cuidar esos pequeños detalles, gestos y actitudes que, de forma intencionada o no, suponen comportamientos machistas. Todo esto trata de reconocer nuestros errores (que los tenemos) y aprender de ellos para no volver a cometerlos nunca más. Hoy, recopilamos algunos de esos comentarios chirriantes que jamás deberías decir en el Día Internacional de la Mujer (ni nunca, por favor).

«Pero, ¿qué queréis reclamar? Si ya hay igualdad…»

No, no la hay. Mientras existan casos de violencia machista, mientras una mujer cobre un céntimo menos por realizar el mismo trabajo que un hombre, mientras se deje de contratar a una mujer por estar embarazada (o se le pregunte en una entrevista si pretende estarlo), mientras existan los roles de género, mientras se relegue a la mujer a un segundo plano en las decisiones de algún tema, mientras haya una minoría de mujeres directivas en las empresas, mientras una mujer siga teniendo miedo al caminar sola por la calle, habrá desigualdad. Por tanto, hasta que éstos y otros millones ejemplos que nos hacen ser conscientes de vivir en una sociedad machista dejen de existir, no deberíamos dejar de protestar.

«Ni machismo ni feminismo»

Está claro que machismo, no. Pero pensar que el feminismo es lo opuesto al machismo es un error que ya deberíamos haber superado. Y no lo decimos nosotros, lo dice ya hasta la misma RAE. El feminismo es la lucha por los valores y reconocimiento de la mujer respecto al hombre, es decir, es la lucha por la igualdad entre hombres y mujeres. Este comentario, a priori tan inocente (porque lo que parece que se defiende es la igualdad), es en realidad bastante dañino porque lleva a confusión. Por tanto, debemos hacer un esfuerzo por erradicarlo y tener claro que la lucha por la igualdad es una lucha feminista (que no una lucha solo de mujeres).

«Si lo que se busca es la igualdad, no hay que celebrar un Día de la Mujer»

Justamente por esa situación de desigualdad, hay que reivindicar con fuerza y a golpe de lucha los derechos de las mujeres. Aunque es algo que hay que hacer cada día, esta fecha simboliza un reconocimiento especial y mundial para luchar, y cuanto más eco hagamos, más efecto tendrá. Por ejemplo, en Islandia ya en 1975, más del 90% de las mujeres del país declararon un día de huelga que paralizó por completo el país. 5 años después, fue el primer país en nombrar a una mujer (Vigdis Finnbogadottir) presidenta del gobierno. Actualmente, este país es un referente en temas sociales de igualdad entre mujeres y hombres.

«¡Felicidades, mujeres!»

Hay personas que, quizá con toda la buena intención del mundo, feliciten a las mujeres en este día e incluso traten de obsequiarlas con algún regalo como si fuese el Día de la Madre o Navidad. Pero no, nada más lejos de la realidad, este día no es una celebración, sino una lucha. Una lucha por los derechos de las mujeres, un día para recordar que aún no existe la igualdad y que lo que se intenta es conseguirla.

«Las mujeres sois muy fuertes porque tenéis que lidiar con el trabajo y la familia»

Esto es un error muy grave. Una mujer no es menos fuerte si no se hace cargo de una familia, si decide no trabajar en casa o, al contrario, si decide no salir a trabajar. Una mujer debe ser libre de elegir cómo desea vivir su vida y, no por ello, ser juzgada. Cada mujer libre es valiente a su manera y es ella misma y nadie más quien debe opinar sobre lo que hace o deja de hacer. Por lo tanto, este día no es para reconocer el valor de “todas las madres, hermanas e hijas”, es para luchar por sus derechos.

«¿Y por qué no se celebra un Día del Hombre?»

Lo primero es que sí se celebra, el día 19 de noviembre. Lo segundo es que hoy es 8 de marzo, Día de la Mujer, por lo que hoy, el protagonismo absoluto lo debe tener esta lucha. Y es solo esta protesta la que debe cobrar importancia porque son las mujeres las que siguen viviendo en situación de desigualdad respecto al hombre. Un hombre no necesita un día para reivindicar sus derechos como hombre porque, por lo general, la sociedad lo sigue preconcibiendo erróneamente como alguien superior. Es por ello que tampoco existe un “Día del Orgullo Heterosexual” o un “Día a favor de las personas ricas”, porque no son personas que sean socialmente excluidas y que vivan algún tipo de situación desfavorable en su día a día.

El cambio está en nuestras manos, y solo será posible evolucionar si hombres y mujeres nos sumamos a esta lucha contra algo que nos afecta a todos por igual. Mientras haya un motivo de protesta, seguiremos protestando. The future is female!