Anatomía del post perfecto en redes sociales
Publicar en redes sociales es como contar un chiste: el mensaje es importante, pero buena parte del éxito depende de cómo se cuente. Porque no es lo mismo oir un chiste a alguien, sin más, que oírselo contar a quien, con su salero natural, nos atrapa en la historia desde el primer segundo.
En redes sociales ocurre lo mismo: podemos publicar en nuestros perfiles sin más, o bien podemos ajustar nuestros mensajes a cada canal y público, para optimizar nuestros resultados: la guía de Simply Measured nos da las claves para incluir en cada publicación los elementos que harán que se convierta en una publicación perfecta.
Twitter no es igual que Facebook y no es lo mismo publicar una imagen en Instagram que en Pinterest. Cada red social es un mundo, y uno mismo como marca, debe saber qué red social es la que más se ajusta a su modelo de negocio, objetivos de ventas o incluso su personalidad.
El post perfecto en Facebook
Que Facebook nos permita escribir libremente más de 140 caracteres no significa que debamos escribir El Quijote en nuestra publicación. La longitud de un post perfecto debería mantenerse entre los 55 y los 99 caracteres. Además, si planteamos una pregunta, haremos que la efectividad de la publicación sea mayor. Como ya comentamos hace unos días, las publicaciones que mejor funcionan en Facebook suelen ser aquellas que ofrecen descuentos, concursos o algún tipo de beneficio a los usuarios. Si en tus publicaciones añades algún emoji, estarás creando una mayor empatía con tu comunidad. Además, tienes que tener en cuenta a qué hora publicas tu post, ya que el tiempo lo es todo cuando se trata de generar impactos.
El tweet de oro
En Twitter la cosa cambia. Si eres de los que les gusta explayarse en sus publicaciones, en esta red social vas a tener que cambiar de hábitos, aunque como bien dice el dicho: a buen entendedor, pocas palabras bastan. Para garantizar el éxito de tu tweet sería conveniente aparecer en «momentos». Para ello, resulta muy conveniente publicar GIF’s, videos o imágenes originales y creativas que llamen la atención de tus seguidores. Además, transmitir una actitud positiva en tus tweets contagiará de optimismo a tu comunidad.
El uso de hashtags hará que el segmento interesado en esa línea de tweets también se interese por ti. No recomendamos que tuitees acerca de todos los hashtags que haya en ese momento, pero sí los más relevantes para tu negocio.
Igual que en otras redes sociales, es importante que controles el factor tiempo. Un estudio de rendimiento de tus publicaciones, que puedes hacer por ejemplo con SocialBro, te revelará cuáles son los mejores momentos para publicar.
Una Instaimagen vale más que mil palabras
Instagram es la red social perfecta para todas aquellas marcas que cuenten con socios o influencers: a través de los embajadores de marcas podemos ir creando una comunidad cada vez mayor. Mientras tanto, para tener el mejor perfil posible, lo que no tienes que hacer es saturar a tu público: debes esperar un tiempo determinado entre cada publicación. Si tus usuarios perciben el exceso de publicaciones, pueden dejar de seguirte.
Volvemos al poder de las palabras: unas imágenes con un copy creativo y original, harán que tus seguidores sientan una mayor atracción por tus publicaciones y, en definitiva, por tu marca. Y ten en cuenta que ahora Instagram no muestra el texto completo sino que lo acorta: sé breve, y no obligues a tus seguidores a pulsar en «y más». Por último, aunque no se permiten enlaces en tus publicaciones, pon tu link en tu bio y facilitarás el tráfico a tu página web.
Pinter-fect.
Publicar el pin perfecto en tu tablero también es posible. Puede que esta red social sea la gran desconocida para muchos, pero puede serte de gran utilidad en tu modelo de negocio si sabes cómo usarla.
La opción de añadir el botón de compra permitirá a tus seguidores adquirir tus productos directamente desde Pinterest. Este tipo de facilidades le dará un valor añadido a tu marca.
Pero, sin duda, lo que verdaderamente hará que te diferencies del resto de usuarios será que añadas contenido propio. A la gente le gusta ver el funcionamiento interno de tu empresa, poner cara a las personas o leer contenidos propios redactados por ti; lo que no quieren es ver el típico tablero de «copy-paste». Además, esta red social te permitirá desarrollar concursos de manera rápida gracias a su sistema de pins.
¡Arriba Periscope!
Para retransmitir cualquier contenido por Periscope, lo primero que tienes que hacer es un análisis de tu audiencia de Twitter para que la emisión tenga éxito. Una de las ventajas de esta red social es su interactividad. Durante la retransmisión, los usuarios pueden realizar preguntas o comentarios que podrás responder en el mismo momento, creando así una experiencia directa con tu audiencia.
Por otro lado, la elección del título de tu conferencia es vital: los usuarios de Periscope eligen qué tipo de contenido quieren visualizar en función de cómo se titulen, así que piensa un título con gancho para que tu retransmisión no quede relegada al olvido.
Ahora ya sabes cómo alcanzar de manera correcta a tu comunidad en cada red social gracias a esta guía de Simply Measured. Una mejor experiencia social con tus seguidores empieza hoy: escribe bien, y destacarás 😉