Marca personal para dummies
Quizá si escuches “marca personal” lo primero que hagas es asociar ese término a algún profesional o una celebrity. Gente que, a priori, necesita cuidar la imagen que da al resto para favorecerlo en el terreno profesional.
Sin embargo, uno de los mayores errores que hacemos es éste: pensar que nosotros no necesitamos trabajar en nuestra “marca personal”. Todos, pertenezcamos a cualquier campo y sector profesional, tenemos presencia online. Y eso se traduce en visibilidad.
La marca personal no es otra cosa que gestionar tu perfil como si fueras una marca. En otras palabras: dar la mejor imagen que puedas para conseguir un objetivo. El objetivo, por ejemplo, puede ser encontrar un trabajo o posicionarte como profesional en tu sector.
¿Para quién es eso de la «Marca personal»?
No es un secreto: la mayoría de las empresas (por no decir todas) buscan tu nombre en Google antes de contratar a un candidato.
Pongamos un ejemplo: eres un Ingeniero Químico que ha terminado su master y está buscando una empresa para meter la cabeza en el sector laboral. Envías CV a cascoporro (o preparas un CV creativo, puedes hacer incluso un CV en 140 caracteres), perfeccionas tus idiomas todo lo que puedas pero tienes tu cuenta de Instagram llena de fotos con amigos de fiesta ¿Crees que eres un candidato atractivo? La verdad es que no.
Aunque es superficial, vale más la imagen que transmites que la que realmente te define (al menos de primeras). Todos deberíamos cuidar mejor la imagen que transmitimos a los demás, sea en el terreno online o no.
¿Cómo cuido mi marca personal?
Para mí uno de los pilares fundamentales es éste: ten el control de tus redes sociales:
No dejes que aparezca cualquier cosa sobre ti. Es tan fácil como aplicar un pequeño filtro de privacidad para que puedas aprobar tú de antemano qué aparece en Facebook o en qué foto te etiquetan en Instagram.
No utilices las redes sociales como un lugar en el que desahogarte. Evita las cosas extremadamente personales. Si estás pasando por una depresión o una ruptura, es mejor que tu futuro jefe no lo sepa (y tus seguidores, tampoco).
Intenta que el tono de lo que publicas sea siempre lo más positivo posible. Es decir, no me refiero a que te conviertas en Mr. Wonderfull ni que publiques frases de aspiracionales continuamente. Pero es mejor no transmitir negatividad. Nadie quiere un empleado huraño, quejica, enfadado… ¿verdad?
Comparte contenido de interés. Para mí es uno de los aspectos más positivos que puedes dar a tus redes sociales. Además de darte a conocer a un público mayor, compartiendo contenidos de interés (en especial de tu área profesional) demuestras que tienes inquietud, que sabes más, que tienes más referencias.
No te conviertas en un robot. No hay que ser ni blanco ni negro. Si demuestras mucha frialdad la gente no va a conectar contigo. Depende también de la seriedad de tu campo, pero es interesante contar cosas personales siempre que connoten algo.
Espero que estas pequeñas pinceladas te hayan ayudado a entender un poco mejor qué es la marca personal y descubrir cómo puede beneficiarte para posicionarte como un profesional en el terreno online. ¿Añadirías alguna forma más para cuidar tu marca personal?